Tres casos prácticos en los que la digitalización nos ayuda a luchar contra el cambio climático

Escrito por Aída Palomo - en colaboración con Revista Roast

Varias herramientas digitales han sido desarrolladas para prepararnos contra los efectos del calentamiento global, pero no todas han sido adaptadas a las necesidades específicas del café. Gracias a Vanessa Rojas de ICAFE, a Patrick Lawrence de Sustainable Food Lab y a Diego Pons de la Colorado State University descubrimos 3 herramientas que, con inversión, datos y mucha investigación, ayudan a que los caficultores tomen mejores decisiones ante los cambios que ya están sucediendo en nuestro planeta. Si se preguntaban cómo podemos ayudar —realmente— a origen para aumentar su resiliencia, aquí tenemos algunas ideas que se compartieron durante el segundo webinar de la serie de “Intersección entre cambio climático y la digitalización en el café”:

Créditos: Diego Pons

Créditos: Diego Pons

1. Medir los Gases de Efecto Invernadero con Cool Farm Tool 

Patrick Lawrence | Sustainable Food Lab

“Si no te conoces, ¿cómo puedes saber lo que puedes lograr?”. Con esta idea en mente, Cool Farm Alliance desarrolló una metodología para medir las emisiones de gases de efecto invernadero en el cultivo de café. Con el Módulo para cultivos perennes de la plataforma Cool Farm Tool, del cual el café es parte, cuantifican y miden emisiones tomando en cuenta los largos periodos de cosecha, la biomasa que se genera como desperdicio y su efecto en la tierra cultivada. Durante su investigación, descubrieron que algunos caficultores llevaban a cabo prácticas que emitían muy pocas emisiones o que, incluso, secuestraban carbono. Reconocer, premiar y replicar dichas prácticas es parte de los objetivos de esta herramienta. Gracias a ella, los productores adquieren visibilidad como actores en la lucha contra el cambio climático y, además, pueden ganar primas por un café bajo en emisiones de carbono. 

2. Monitorear enfermedades y dosificar agroquímicos con CR-CAFE 

Vanessa Rojas | ICAFE

“El uso eficiente de los recursos es importante para lograr cambios ambientales”. La intención de CR-CAFE, herramienta digital desarrollada por ICAFE en Costa Rica, es que, mediante el aumento de la productividad y rentabilidad de los caficultores, se pueda tener un menor impacto en el ambiente —menos emisiones de CO2, por ejemplo— y compensar la actividad agrícola con otros beneficios ambientales. ¿Cómo lo hace? Los productores descargan la aplicación, incluso en celulares de bajo costo, e ingresan datos básicos, a cambio reciben información que les ayuda a monitorear enfermedades, hacer estimaciones de cosecha y dosificación de fertilizantes. Esta aplicación sólo sirve para los productores costarricenses, pues su información y recursos se basan en las condiciones específicas de ese país. Y esa es su gran enseñanza, además de proveer gratuitamente una plataforma única, amigable y útil, sus datos están hechos a la medida de los productores, alimentados con años de investigación en sus necesidades y características, y validados en campo. Es una herramienta que brinda certeza y que garantiza beneficios no sólo a los caficultores, también al medio ambiente.

3. Predecir precipitaciones y temperaturas en origen, con un modelo desarrollado en la Columbia University

Diego Pons | Colorado State University

Este modelo nos invita a imaginar todo lo que podríamos hacer si tuviéramos, en este mismo momento, información real y completa acerca de las precipitaciones y temperatura que habrá dentro de 3 o 4 meses. ¿Qué decisiones podríamos tomar en cuanto a la fertilización, la cosecha o la protección ante enfermedades en el café? Seguramente serían decisiones más informadas, que ayudarían a reducir costos y a prepararse mejor ante fenómenos climáticos. Este modelo propone sofisticar de tal forma las predicciones climáticas que se pueden establecer “límites” —digamos, de precipitación deseable— específicos para cada región, zona o finca. Hablamos de predicciones hechas a la medida en extensiones de hasta 8 kilómetros. Este modelo ya está siendo puesto en práctica en varios orígenes, Guatemala es uno de ellos. El reto: seguir alimentándolo con más fuentes —desde información de la NASA hasta retroalimentación empírica de los productores—, de tal forma que sea cada vez más preciso, pueda reducir su escala y permita que más caficultores tomen mejores decisiones y estén mejor preparados ante el cambio climático. El reto más grande: llegar a todos los que lo necesitan.

Esto y mucho más fue platicado durante la sesión del 8 de abril 2021. Las grabaciones están disponibles en nuestro Canal YouTube.

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